Hay muchos lugares en los cuales la vida de las personas está ligada directamente al mar o el océano, y ese es precisamente el caso de las Islas Canarias, ese paraíso en mitad del Océano Atlántico. Tanto es así que el artista Jason deCaires Taylor se planteó que si la vida en Lanzarote estaba tan ligada al océano que la rodea, ¿por qué no contarla desde las profundidades marinas?

Y este fue el punto de partida de este artista autor de las 300 esculturas que integran la ‘muestra permanente’ del museo subacuático situado bajo las aguas de Lanzarote. Reserva una sesión de submarinismo porque el Museo Atlántico te encantará, pero tendrás que concertar la visita con alguno de los centros de buceos autorizados para realizar la inmersión con instructores que a su vez harán de guías turísticos.

A pesar de ser el primer museo submarino de Europa, Jason deCaires Taylor es también el creador del primer parque de esculturas submarinas en Grenada y del primer museo submarino del mundo MUSA (Museo Subacuático de Arte), situado en las aguas que separan la costa de Cancún e Isla Mujeres, México, y Ocean Atlas (2014).

El proyecto tiene una doble vertiente artística y conservacionista. Las esculturas están hechas en hormigón de pH neutro y se encuentra a 14 metros de profundidad, creando un arrecife artificial que, con el tiempo, pretende incrementar la biomasa marina. El proyecto se promovió desde el mismo gobierno de Lanzarote y de Canarias y ya se ha convertido en una de las intervenciones turísticas en Canarias con mayor impacto mediático internacional.

Pero más que seguir hablando sobre el proyecto, os mostramos algunas de las esculturas que se pueden ver.