Desde sus orígenes, Fyord ha tenido una fuerte vinculación con el mundo de la náutica. Pero, aunque los diseños y prendas más técnicas han dado paso a otras influencias, el espíritu de la marca siempre encontrará inspiración en el mar. Por ello, Fyord mantiene desde sus inicios el apoyo a equipos de competición de vela, participando en diferentes categorías con un doble objetivo: deportivo y social. Hablamos con José Luís Maldonado –responsable del equipo de vela de Fyord- para que nos descubra las claves de cómo este deporte puede ayudar a personas que han perdido el rumbo en sus vidas.

La labor social del barco Fyord es ayudar en la terapia de personas que padecen distintas adicciones. ¿Cómo puede ayudar la vela a estos enfermos?  

El proceso de rehabilitación es muy similar a la dinámica que debe llevar la tripulación en un barco de vela. Ambos se basan en un trabajo de equipo -también el del enfermo con sus terapeutas- por lo que cada uno debe hacerse responsable de su papel, estar coordinados y tener absoluta confianza en el que lidera, cumpliendo sus indicaciones sin cuestionarlas. Asumir tus limitaciones y dejar que otro tome el mando cuando puede hacerlo mejor que tú mismo es la clave. De la misma manera que un táctico da las ordenes a toda la tripulación, incluido al patrón.

En los dos casos es también importante admitir tus errores para poder mejorar y tener espíritu de autocrítica, ya que el adicto tiende a excusarse en las circunstancias o el entorno rehuyendo la responsabilidad y el poder que tiene respecto a lo que le pasa.

¿Cómo se integra en el barco Fyord el compromiso deportivo con la labor social?

El día antes de iniciar una regata organizamos una salida para navegar con personas que están viviendo un proceso de desintoxicación. Generalmente lo hacemos en coordinación con la asociación Proyecto Hombre, que cuenta con centros en todos los lugares en los que competimos, como Cataluña, Comunidad Valenciana o Baleares.

¿En qué consiste la actividad?

Durante la salida, el grupo que nos visita participa como tripulación y ayudan en todas las maniobras necesarias para la navegación. De esta manera, les mostramos de manera práctica lo necesaria que es la coordinación del equipo, la definición de un rumbo y las decisiones a tomar en función de las condiciones. Pura metáfora de la su situación en la que viven.

También tendrán tiempo de disfrutar de la travesía –algo que muchos hacen por primera vez- con toda la magia y carga de energía que implica. Además, podrán compartir todo esto con alguien que ha pasado por lo mismo que ellos y puede hablarles con conocimiento de causa: yo mismo.

Como comentas, sabes muy bien por lo que están pasando. ¿cuál crees que es la clave que les aporta tu presencia?

La adicción se basa en un autoengaño, por eso debes dejarte guiar por expertos y por el ejemplo de otros adictos que han pasado lo mismo que tú. Para romper la espiral de autodestrucción del adicto es necesario algo que algo le haga cambiar el chip. En mi caso fue ver a otra persona como yo ha había logrado reconstruir su vida: vi que era posible. Yo espero que, tras estar con ellos, vean conmigo que no todo está perdido, que se puede volver a tener una vida. De la misma manera que a mi me sucedió.

¿Qué consejo darías a los adictos y a sus familias?

Familia y amigos te quieren e intentan ayudarte pero no tienen esa capacidad. Lo primero que deben tener claro es que un adicto no lo es por diversión, se trata de un enfermo. Así que no se recuperará solo con su fuerza de voluntad, sino depositando toda su confianza en quien le guía y trabajando cada día en la dirección correcta.Por eso deben hacerse a un lado y dejarlo todo en manos de profesionales. Hay que asumirlo aunque les duela.

Actividades como las que realizamos con el barco Fyord en colaboración con Proyecto Hombre, son un incentivo más dentro de la recuperación de estos enfermos, por lo que estamos encantados de contribuir en todo lo que está en nuestra mano.

Pasando al plano deportivo, el barco Fyord ha cosechado un triunfo tras otro a lo largo de los estos 5 años en la mayoría de las regatas que ha participado. ¿Cuál es tu balance?

Todos los que hemos estado involucrados en el equipo de regatas de Fyord estamos particularmente orgullosos de los resultados alcanzados y agradecidos a la marca por haber apostado por la vela. Haber participado en regatas tan importantes dentro del circuito español como el Conde de Godó, las copas del Rey y la Reina, o los campeonatos de España y Europa, ha sido un reto deportivo en el que hemos cosechado éxitos que importantes. Por ejemplo, en 2016 conseguimos quedar primeros de nuestra categoría en las siete regatas en las que participamos, siendo la más importante el Trofeo Conde de Godó.

Después de este palmarés tan impresionante, ¿cómo enfocáis 2017?

Este año será diferente. Después de un año así y con una trayectoria detacada en categoría crucero, era necesario hacer un punto de inflexión. En la actualidad, Fyord competirá con un nuevo barco en categoría Snipe. La vela ligera nos dará la oportunidad, tanto a mi como al otro tripulante Miguel Cebolla de Pablos, de retomar sensaciones y mejorar el rendimiento físico y técnico en un año de transición hacia nuevos retos.

¿Cuáles son las competiciones más inmediatas que tenéis en el horizonte?

Lo inmediato es el Gran Trofeo de Valencia este mismo 20 de mayo y el Campeonato de España Master en Madrid del 1 al 4 de junio.